Se acabo todo para Jorge Salas Arenas
El periodista Aldo Mariátegui ha revelado una noticia de gran relevancia en torno al cuestionado presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Jorge Salas Arenas.
Según Mariátegui, ahora Salas Arenas sí podrá ser juzgado por el Congreso, lo cual marca un hito significativo en el panorama político peruano.
En su columna, Mariátegui expresa su satisfacción por la decisión de la Corte Suprema de permitir que Salas Arenas sea sometido a una acusación constitucional, lo que conlleva un antejuicio y juicio político en el Congreso.
“Es una buena noticia que la Corte Suprema haya establecido que el presidente del JNE, Salas Arenas, sí puede ser sometido a una acusación constitucional (con el consiguiente antejuicio y juicio político en el Congreso), aunque me sorprende que una sala presidida por el caviarazo César San Martín”
Esta noticia ha generado gran interés debido a las implicaciones que tiene para la institucionalidad democrática del país.
Una de las razones detrás de esta decisión es el aval que Salas Arenas otorgó al fraude electoral del año 2021, así como su autorización para la inscripción del partido del genocida Antauro Humala, permitiéndole participar en las elecciones del 2026 a pesar de su oscuro historial como asesino de policías.
Mariátegui destaca que esta resolución de la Corte Suprema es justa, ya que todos los altos funcionarios del Estado deben estar sujetos al control político del Legislativo. En este sentido, Salas Arenas no puede ser una excepción y debe rendir cuentas por sus acciones, especialmente aquellas que han puesto en riesgo la imparcialidad del órgano electoral que preside.
“Esta decisión me parece justa, porque todos los más altos funcionarios de los poderes del Estado (presidente, ministros, magistrados del TC, vocales supremos, fiscales supremos, defensor del Pueblo y contralor) están —y deben estarlo— sometidos al control político del Legislativo, así que el titular del “poder electoral” (JNE) no puede ser una excepción a esta regla de oro y estar blindado con la excusa de que él está más allá de los vaivenes de la política para no dañar la imparcialidad del órgano electoral”
El periodista también hace hincapié en que Salas Arenas no ha perdido su condición de vocal supremo y que, al regresar a su puesto después de su gestión en el JNE, deberá enfrentar las consecuencias políticas de sus decisiones, como la inscripción de un partido antidemocrático liderado por alguien con un historial cuestionable como Antauro Humala.
En conclusión, la revelación de Aldo Mariátegui sobre la posibilidad de que Jorge Salas Arenas sea juzgado por el Congreso marca un momento crucial en la lucha por la transparencia y la responsabilidad en la política peruana, demostrando que ningún funcionario está por encima de la rendición de cuentas ante la sociedad y las instituciones democráticas.