Escandaloso faenón de Sagasti por ser un inepto comunicador
Cuando un presidente improvisado no tiene buena llegada comunicacional con la prensa, la mejor excusa para solucionar este problema es contratar a publicistas para dar el servicio se asesorías, es lo que indica el diario Peru21 y que afirma que el 20 de enero ingresaron a palacio de gobierno cuatro publicistas quienes ahora asesoran al presidente, y continuar derrochando el dinero del erario nacional en inservibles lobbies con el gobierno y que resultan sin ningún beneficio para la población.
Asimismo, el cinismo de Francisco Sagasti no tiene límites puesto que ahora arremete con los medios de comunicación aconsejándoles que se “asesoren” en el área, lo cual genera sentimientos encontrados ya que, ¿si una pregunta no le gustó, el periodista resulta ser poco profesional?, ¿o es una persona sin estudios?
Al respecto, el candidato presidencial de Alianza para el Progreso, César Acuña, se preguntó: «¿Y para cuándo (Sagasti) convoca a especialistas independientes en salud para un real diagnóstico y presentar un plan concreto para enfrentar la pandemia?».
En el mismo sentido, el vocero de APP, César Combina, afirmó que «es necesario priorizar el tema de salud y economía», y «los gastos superfluos en asesores o consultorías deben reducirse». Comunica en el Diario Expreso.
El vocero tiene absoluta razón. Sagasti debe tomar medidas factibles e inmediatas para atacar de lleno los problemas que afectan al sector de salud y economía. Sin embargo no se ha visto un movimiento preciso hasta ahora; sólo miles de soles gastados a diestra y siniestra sin ningún fin lucrativo.
«Es necesario revisar de forma urgente la estructura ministerial. Menos gasto, cero duplicidad de gastos y mejor inversión», expresó el parlamentario a través de su cuenta de Twitter.
Los gastos desde que Sagasti tomó la presidencia han sido abismales. El país continúa pereciendo en los mismos problemas. Tenemos candidatos al Congreso de la República y a la presidencia que no parecen tener el mayor interés por la población.
Todo es un desorden y, sin pensarlo dos veces, se sabe que Sagasti está en ese puesto porque fue comprado.
La corrupción no tiene límites a la hora de querer alcanzar el poder. Éste gobierno y su gente lo han demostrado hasta más no poder.